La máscara solar fue tallada a mano en 1963 en Burkina Faso, en África Occidental, por los pueblos Bwa. Es una máscara de tablón grande única hecha de una sola pieza de madera. Representa un rostro con un motivo de flecha como una nariz circular, ojos concéntricos y una boca abierta y redonda.
Los pueblos Bwa bailan la Máscara del Sol durante las ceremonias agrícolas para bendecir los cultivos de temporada.
La tribu Bwa ocupa grandes áreas de Malí y Burkina Faso, extendiéndose desde las orillas del río Bani en Malí en el norte hasta Diebougou y la frontera entre Ghana y Burkina Faso en el sur. Los Bwa han producido diferentes tipos de máscaras de madera que representan personajes humanos y animales con rasgos abstractos dramáticos y diseños geométricos de colores brillantes trabajados en la superficie de sus máscaras.
Algunas otras máscaras tienen formas abstractas difíciles de asociar a cualquier personaje animal o humano. La religión Bwa se basa en objetos y figuras mágicas que se conservan en los santuarios de las aldeas y las familias. El espíritu que habita el santuario también se encuentra en máscaras que representan un espíritu del arbusto conocido como ‘Su’ que aparece en diferentes formas animales.
Estas máscaras aparecen en varias ocasiones, incluida la iniciación de los niños pequeños cuando se les informa sobre las diferentes máscaras, sus significados y cómo las diversas máscaras simbolizan los primeros mitos y la historia local durante las celebraciones anuales cuando se bailan las máscaras.
Esta máscara liviana se puede montar fácilmente en la pared.
Máscaras de África: Las máscaras fueron probablemente los primeros objetos del arte africano en captar el interés de los amantes del arte del Nuevo Mundo. Al igual que las esculturas, las máscaras cumplían funciones distintas.
Fueron utilizados para la iniciación, los ritos de fertilidad, el culto a los antepasados ​​y espiritual, y otras ceremonias. La multitud de estilos que produjeron las máscaras revelaron grandes historias artísticas. Las máscaras africanas se han coleccionado desde que artistas como Pablo Picasso iniciaron su famosa colección. Ha declarado que las máscaras africanas inspiraron gran parte de su trabajo.